Con “Ivága hovy”, ocho estudiantes de la escuela Bernardino Rivadavia participarán de una competencia nacional en el que competirán escuelas de todo el país. Necesitan de “un like” para ganar la beca “Eco Fan”.
La Escuela Industrial Bernardino Rivadavia fue seleccionada para participar en el Desafío Eco YPF 2024, que se llevará a cabo del 1 al 3 de noviembre en Concepción del Uruguay, Entre Ríos. El equipo, conformado por ocho estudiantes y tres docentes, competirá con un vehículo eléctrico que fue diseñado y fabricado completamente por los alumnos en las instalaciones de la escuela.
El Desafío Eco YPF es una competencia nacional en la que participan entre 130 y 150 escuelas técnicas de todo el país. En este evento, los equipos deben diseñar, construir y pilotar autos eléctricos, promoviendo las energías renovables y la innovación tecnológica. Para la Escuela Bernardino Rivadavia, este proyecto no solo es una oportunidad de competir, sino también de aplicar conocimientos prácticos adquiridos a lo largo de su formación técnica.
“Es un vehículo que se fabricó desde cero en la escuela con los alumnos. Se les guió de cómo hacer y qué dejar de hacer, pero lo tienen que fabricar y soldar ellos. Nosotros les guiamos para que puedan realizar el trabajo nada más. La escuela técnica se caracteriza por ese tipo de cosas en el cual se le enseña al alumno no solamente el saber, sino también el saber hacer”, explicó a El Litoral, Omar Aguirre, uno de los tres profesores a cargo, junto a Amelia Báez y Jorge Aman.
Con Ivága hovy (en guaraní significa cielo azul), el equipo que incluye estudiantes de quinto y sexto año de las especialidades de automotores, construcciones y electromecánica. Ellos son los responsables de cada etapa de la fabricación del vehículo, desde la estructura y los sistemas eléctricos hasta los frenos y la seguridad del piloto. En esta edición, el equipo contará con dos pilotos femeninos y uno masculino, quienes tendrán el desafío de poner a prueba el prototipo en la carrera de resistencia que se celebrará el 3 de noviembre.
“Las maquinarias que se utilizan son de la escuela, todo es de fabricación artesanal, hecho tanto por los alumnos y las alumnas en los tornos de la escuela, en la parte de herrería y automotriz. Se les toma exámenes diversos, tanto de estructura y cálculos de estructura, como de lo que es todo el proceso de fabricación y de instalación eléctrica del vehículo, como así también toda la parte de frenos y dirección, la parte de las ruedas y la parte de seguridad del piloto”, agregó a este medio el profesor que acompaña a los alumnos.
Además de la competencia en pista, el equipo está participando en el
concurso virtual “Eco Fan”, en el que el público puede votar por su
escuela favorita a través de la página oficial del Desafío Eco YPF.
Las escuelas que reciban más “me gusta” tendrán el beneficio de largar
en las primeras posiciones, lo que puede ser crucial para el desarrollo
de la carrera. Para apoyar al equipo, los interesados pueden escanear un
código QR que los llevará directamente a la página de votación.
“Ahora que la parte mecánica está prácticamente terminada, nos enfocaremos en los detalles estéticos del vehículo para dejarlo listo para la competencia”, contó Aguirre.
El vehículo, que aún está en las fases finales de preparación, fue sometido a varias pruebas en la ciudad de Corrientes. Este tipo de desafío no solo es una competencia de velocidad y destreza, sino también una oportunidad para que los estudiantes aprendan sobre energías renovables y sobre cómo la tecnología puede contribuir a un futuro más sostenible. Los alumnos de la Escuela Bernardino Rivadavia aplicaron conocimientos de física, matemáticas y mecánica, adquiridos durante su formación técnica, para llevar a cabo la construcción de este prototipo, demostrando que es posible diseñar vehículos ecológicos y eficientes.
Fuente: El Litoral